En este último atardecer, gracias a un respiro que nos han
dado las nieblas persistentes castellanas, hemos podido disfrutar de una imagen
gratificante muy cerca del horizonte. Venus y un contundente Mercurio se han
dejado mirar y admirar. Las fotos las he tomado con el teléfono y tienen solo el
valor de lo instantáneo y de lo no premeditado, pero aun así, creo que el aspecto
del conjunto es magnífico. Ad Astra. Edgarus.
lunes, 12 de enero de 2015
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario