La noche es la mitad de la vida, y la mitad mejor. Goethe



jueves, 31 de diciembre de 2009

El NUEVO NÚMERO DE JDSO TAMBIÉN ES NUESTRO


Desde hoy está disponible el número de invierno de JDSO. Como ya viene siendo habitual las páginas de este recién estrenado Volumen 6 están repletas de observaciones y descubrimientos españoles. Me es muy grato comunicar que dos extensísimos y relevantes trabajos están firmados por mis compañeros.



Como ya comenté en este espacio, Rafael Benavides presenta un importante trabajo (en colaboración con Francisco Rica, Esteban Reina, Julio Castellano, Ramón Naves y Luis y Salvador Lahuerta) dando a conocer el descubrimiento de 150 nuevas estrellas dobles de las cuales 142 son sistemas de movimiento propio común. Un impecable y riguroso trabajo para el que se ha realizado un gran esfuerzo de estudio astrofísico y de observación. Han sido más de dos años de duro trabajo en equipo pero finalmente el empeño ha dado sus frutos. El artículo se ha titulado New Wide Common Proper Motion Binaries.

Por otro lado Rafael Caballero, presenta un excelente trabajo con el nombre New Northern Hemisphere Common Proper-Motion Pairs from the UCAC-3 Catalog . En él, se dan a conocer nada menos que 310 nuevos pares de movimiento propio común descubiertos extrayendo datos del nuevo catálogo UCAC-3.

La calidad de ambos artículos es indiscutible y se elevan sin duda a la categoría de profesionales. Una vez más, queda patente el alto nivel de los doblistas españoles. Mi enhorabuena a los autores. Sois un orgullo para todos los que nos dedicamos a la Astronomía de Estrellas Dobles; pero no solo aquí, sino también a nivel internacional. Una bonita manera de terminar este Año Internacional de la Astronomía. Esta noche tendremos algo más por lo que brindar. Feliz año nuevo, compañeros.

Termino con una cita que me ha encantado y que abre este nuevo ejemplar de JDSO. Representa muy acertadamente el sentir y la filosofía de nuestro trabajo como doblistas:

The appeal of observing double stars is the fun of measuring a difficult or long-neglected pair, and the fact that your data become part of a progression of measurements spanning over two centuries - data that may be combined with measures made long before you were born and used by someone long after you're gone.
William I. Hartkopf

Hasta... el año próximo. Chin Chin.

martes, 22 de diciembre de 2009

UNA CONFERENCIA, UN LIBRO Y UNA TARDE REDONDA

Hace días que quería haber escrito esta historia pero por falta de tiempo me ha sido imposible. Más vale tarde que nunca. En realidad son dos historias distintas y solapadas. El pasado día 15 asistí a una conferencia programada por el Museo de la Ciencia de Valladolid. El conferenciante es amigo y compañero: se trata del Dr. Fernando Muñoz Box, Profesor Titular de Óptica y Espectroscopía de la Facultad de Ciencias de la UVA. El profesor, como yo siempre le llamo, lleva ya un tiempo jubilado de sus labores docentes pero, sin embargo, sigue manteniendo una tremenda actividad. Alguien como él no puede parar. No cesa de investigar ni de dictar conferencias sobre aspectos relacionados con sus otras pasiones: la Astronomía, los relojes de Sol y la apasionante historia de los calendarios. Es un experto en estas temáticas y podemos descubrir muchos de sus conocimientos en un libro suyo titulado Las Medidas del Tiempo en la Historia: Calendarios y Relojes. El profesor Muñoz Box es un excelente divulgador. No en vano acumula una larguísima experiencia dando clases en la Facultad y como añadidura, posee una rara y poco abundante habilidad, la de ser capaz de contar las cosas más espinosas de forma que parezcan fáciles y asequibles. Para mí es un deleite escucharle y procuro acudir a sus charlas siempre que puedo. Hace ya años que es Socio Honorario de Syrma: fue nuestro reconocimiento a su dedicación a la asociación desde los inicios de su fundación. Siempre ha sido nuestro benefactor a todos los niveles.


Dadas las fechas en las que estamos, el título de la conferencia del otro día fue muy acertado: "Por qué el 25 de diciembre es Navidad y otras historias del calendario". Y tampoco se quedó atrás el cartel anunciador, tremendamente original. ¿Quién no se ha preguntado por qué se eligió el día 25 de diciembre para conmemorar la Natividad? El profesor nos dio todo lujo de detalles sobre la evolución del calendario hasta llegar al que tenemos en uso, además de nutridas anécdotas y curiosidades sabiamente dosificadas a lo largo de la disertación, las cuales, amenizaron el interés de los muchos oyentes que nos reunimos en el auditorio del Museo de la Ciencia. Parece ser, según sus investigaciones, que la elección de la fecha del 25 se justificó únicamente como un medio eficaz de eclipsar las fiestas saturnales que en el solsticio de invierno se celebraban en Roma. Una mera pugna entre deidades y liturgias. Nada más que eso. Finalmente, hubo tiempo para una interesante rueda de preguntas a las que Fernando Muñoz Box respondió distendidamente ampliando información sobre ciertos pasajes.

Estuvo brillante. No lo puedo remediar: tengo una especial devoción por este hombre, amén de una profunda admiración por su valía, por su carisma y por su forma de ser. Muchas gracias, profesor.

Os contaré ahora la otra historia paralela que comentaba al principio. Resulta que, a la entrada a la sala de conferencias, una azafata entregaba un libro a cada uno de los asistentes. ¿Recordáis la historia que titulé "Asómate al Universo desde Valladolid"? Bien, pues el Museo y las demás entidades colaboradoras en la novedosa idea de hacer una exposición de fotografía astronómica utilizando el mobiliario urbano, han rematado la faena editando un libro en alta calidad que recoge las 48 imágenes -junto a sus correspondientes textos- que conformaban la exposición. Un preciado recuerdo, sin duda. Máxime, cuando me llevé la sorpresa de que aparezco en una de las fotografías. En concreto, al final del libro hay un capítulo donde se repasan -mediante imágenes- las actividades de divulgación en las que ha participado el Museo de la Ciencia dentro de los programas dedicados al Año Internacional de la Astronomía. Y ahí estoy, en una de las observaciones públicas nocturnas en las que colaboré junto a otros muchos compañeros de Syrma. Aquí os dejo una foto de la portada. En fin, una conferencia, un libro y una tarde redonda.
 

 
Aprovecho para desearos unas Felices Fiestas (saturnales o cristianas, tanto monta) y hacer una recomendación especialmente dedicada a los doblistas: ojo con el espumoso pues, aunque hay muchas, no todas las estrellas son dobles. Hasta aquí.
 


domingo, 20 de diciembre de 2009

LAS OLVIDADAS DOBLES DE STEIN (I)

Este es el título de un artículo que publico este mes en la revista AstronomíA, dentro de la sección fija mensual "Estrellas Dobles" que dirige mi compañero Rafael Benavides. El trabajo, primera parte de dos artículos, trata exclusivamente de las estrellas dobles de Stein (ya os hablé de ello por aquí), abarcando gran cantidad de detalles históricos relativos al cómo y porqué del descubrimiento y medición de este importante -y olvidado- listado de estrellas dobles. En el próximo número de enero se publicará la segunda parte, más enfocada hacia la observación y medición con medios amateurs y basada en mi experiencia personal.


Por cierto, a partir del mes de enero, seré incluido como colaborador en la revista, hecho que ha supuesto, por qué no decirlo, una gran alegría para mí. AstronomíA es la publicación de referencia en España y que me hayan tenido en cuenta es un motivo de orgullo personal, máxime dada la gran cantidad de amateurs y profesionales de nivel que publican en sus páginas desde hace ya tantos años. Mi agradecimiento a Ángel Gómez Roldán, redactor jefe de la revista (a quién conocí en el Congreso de Córdoba), por haber creído que lo merezco.

También quiero hacer referencia a un excelente artículo aparecido en el número de este mes (Descubriendo nuevos mundos desde el espacio: la misión CoRoT), firmado por Roi Alonso Sobrino, astrofísico que trabaja en el Observatorio Astronómico de la Universidad de Ginebra (Suiza) y que forma parte del equipo del satélite CoRoT. Resulta que el vallisoletano Roi Alonso fue miembro de Syrma, mi asociación, mientras estudiaba Físicas en la Universidad de Valladolid y antes de marcharse a Canarias para terminar la carrera en la especialidad de Astrofísica. Roi, fue célebre por descubrir un planeta extrasolar tipo Júpiter (bautizado como TrES-1) durante sus estudios de doctorado, y lo hizo con un simple telescopio de aficionado de ¡10 cm! Hace un par de años, visitó nuestro ciclo de conferencias anual para contarnos su aventura. Mi enhorabuena por su rompedora trayectoria y por sus éxitos profesionales.

Por último, comentar que AstronomíA también hace referencia al I Curso de Fotometría Astronómica para la Medición de la Contaminación Lumínica, que se celebró en el Observatorio de Calar Alto, Almería, durante los días 16 al 18 del pasado mes de octubre, al que asistieron 17 astrónomos aficionados españoles. Al curso asistió mi compañero Fernando Cabrerizo Palomo, webmaster de Syrma y excelente astrofotógrafo entre otras muchas cosas.

En fin, que este suculento ejemplar de AstronomíA de diciembre ha resultado muy vallisoletano. Eso está bien. Hasta aquí.

jueves, 26 de noviembre de 2009

EL CONGRESO PRO-AM DE CÓRDOBA: MI CRÓNICA PERSONAL

Durante los días 20, 21 y 22 de noviembre se ha celebrado en la ciudad de Córdoba un encuentro astronómico totalmente calificable como histórico. Se trata del primer congreso Pro-Am organizado en España (Colaboración Pro-Am en Investigación Astronómica). Este es el cartel oficial.



El evento ha sido organizado por la Sociedad Española de Astronomía en colaboración con la Universidad de Córdoba, el Instituto de Astrofísica de Canarias, el Instituto de Astrofísica de Andalucía, Consolider-Ingenio GTC y el Ministerio de Ciencia e Innovación. El llamamiento ha tenido una extraordinaria acogida, siendo más de 100 los congresistas que hemos acudido a Córdoba este fin de semana. Las ponencias orales, tanto de astrónomos amateurs como de profesionales, se han distribuido en cinco sesiones de trabajo, consolidándose un denso programa de intervenciones que ha permitido exponer de manera clara el estado actual de las investigaciones astronómicas españolas y las posibles vías de colaboración Pro-Am. Los temas desarrollados abarcaron un amplio espectro de disciplinas observacionales, constatándose el alto nivel de los trabajos amateurs y su marcado carácter de especialización, siempre de la mano de equipos de observación e instalaciones cada vez más potentes, para demostrar que es posible y “necesaria” la integrabilidad de estas labores en programas de investigación profesionales. Podéis consultar el programa aquí.
Ante la falta de tiempo material para poder impartir más ponencias orales, la organización permitió también realizar contribuciones mediante el formato de pósters científicos que fueron expuestos en el hall de entrada al auditorio. Las sesiones se celebraron en el Rectorado de la Universidad de Córdoba (antigua Facultad de Veterinaria) un bello edificio neomudéjar, ubicado en la Avenida de Medina Azahara y considerado como uno de los inmuebles emblemáticos de la ciudad. Aquí os dejo una imagen.


Sede del Congreso. Rectorado de la Universidad de Córdoba. El reloj marca las 9:20, era la mañana del domingo y estaban a punto de comenzar las últimas sesiones.

Como es lógico, también las estrellas dobles estuvieron en Córdoba y lo hicieron mediante la modalidad de póster. Por un lado, Rafael Benavides, Juan Luis González y el que suscribe presentamos un póster titulado Investigación en Estrellas Dobles Visuales, exponiendo todos los pormenores relativos a la metodología de trabajo, la instrumentación, los objetivos y programas de observación (tanto propios como en colaboración con la Sección de Dobles de la LIADA) y los resultados (mediciones y descubrimientos). Asimismo, dedicamos un apartado íntegro a El Observador de Estrellas Dobles y su repercusión en el panorama de las estrellas dobles tras su primer año de vida.






El segundo póster, a cargo de Rafa Benavides, en colaboración con Francisco Rica, Esteban Reina, Julio Castellano, Ramón Naves y los hermanos Luis y Salvador Lahuerta fue el vehículo para dar a conocer el descubrimiento de 141 pares de movimiento propio común de gran interés astrofísico. Este importante trabajo que será publicado próximamente en JDSO, aporta mediciones actualizadas de todos los nuevos sistemas pero, además, se ha hecho un gran esfuerzo por realizar un completo estudio astrofísico y de caracterización para asegurar que todos los pares listados tuvieran altas posibilidades de constituir sistemas físicos. Estos estudios complementarios fueron realizados por Francisco Rica, experto y pionero en este tipo de tareas dentro de la comunidad de doblistas no profesionales. Los descubrimientos, una vez se incorporen al WDS, incrementarán de manera importante el catálogo personal de Rafael Benavides, al que desde aquí, doy mi más efusivas felicitaciones.



Llegué a Córdoba el viernes por la mañana y como el congreso no se inauguraba hasta las siete de la tarde aproveché para perderme por las calles cordobesas y visitar los monumentos más destacados de la ciudad. A medida que me iba acercando al casco antiguo me di cuenta de que Córdoba ya me había cautivado. He quedado rendido ante ella y me he hecho el firme propósito de volver.
Ya por la tarde, tras la recepción y acreditación de los congresistas, se inauguró oficialmente el congreso. En el acto inaugural presidieron la mesa Manuel Torralbo Rodríguez, Vicerrector de Comunicación y Coordinación Institucional de la Universidad de Córdoba; Emilio Alfaro, investigador del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) y Presidente de la Sociedad Española de Astronomía (SEA); Manuel Sáez Cano, Profesor de Física de la Universidad de Córdoba y Presidente del Comité Local Organizador del Congreso y Francisco Sánchez, Director del Instituto de Astrofísica de Canarias, quien tras el acto impartió la primera conferencia del congreso. Posteriormente se nos ofreció un coktail de bienvenida en las propias dependencias del Rectorado. Fue ésta una magnífica (y deseada) oportunidad para departir largo y tendido con multitud de astrónomos profesionales y amateurs. Todos los que durante los años que llevo dedicado a la astronomía he seguido y admirado a través de sus trabajos. Por cierto, a nivel personal, este viaje ha resultado para mí muy emotivo. Por fin, tras varios años de colaboración, he podido conocer en persona a mis colegas Rafa y Juan Luis. A veces uno tiende a idealizar a las personas. Debo decir que en este caso todas mis preconcepciones se han superado con creces. No me cabía duda de sus cualidades como astrónomos pero, además, recalco con mayúsculas que son dos tipos sensacionales. Sin duda se ha forjado una sólida amistad. ¡Ha sido un placer, chavales! Por si fuera poco y para redondear estos días cordobeses, también me he reencontrado con mi amigo, colega y tantas veces maestro en aspectos astronómicos Francisco Rica. Vamos, que estuve en mi salsa: amistad, cordialidad y astronomía. ¿Se puede pedir más? Tengo que dar la razón a D. Jose Luis Comellas, cuando dice que “la astronomía hace buena gente”.


Acto inaugural.


Coktail. De izquierda a derecha, Rafael Benavides, Francisco Rica, un servidor, Juan Luis González y mi paisano, variabilista de pro, Miguel Rodriguez.



Pose en la puerta del Rectorado junto a Francisco Rica y Amadeo Aznar, a quien conocí también en el Congreso. Este doblista valenciano es colaborador habitual en la Sección de Estrellas Dobles de la LIADA.

El sábado fue un día intenso, ya que el duro programa de ponencias ocupó toda la mañana y parte de la tarde. Lógicamente, hubo varios recesos para estirar las piernas y tomar algún refrigerio que la organización puso amablemente a nuestro servicio. Durante estos descansos los congresistas aprovechábamos para comentar las ponencias y cómo no, para conocernos e intercambiar inquietudes, proyectos e ilusiones de nuestra pasión por la astronomía. Para rematar la jornada los organizadores nos ofrecieron una cena de gala en el impresionante Palacio de Congresos y Exposiciones de Córdoba situado en una de las calles aledañas a la Mezquita.


Entre plato y plato. Un momento de la cena de Gala del Congreso.



 Emilio Alfaro proponiendo un brindis  al final de la cena.


Aquí me tenéis posando con la Organización del Congreso.

El domingo por la mañana, día de la clausura asistimos a la última sesión de ponencias antes de dar paso a la mesa redonda para debatir las conclusiones y la planificación. Durante unos de los descansos conocí al astrofísico Pablo Santos Sanz, vallisoletano como yo y miembro- en su época de estudiante de Físicas en la Facultad de Ciencias de Valladolid- de la Sociedad Astronómica Syrma. Pablo es investigador en el Departamento de Investigación del Sistema Solar del Instituto de Astrofísica de Andalucía (CSIC). También es muy conocido por su colaboración en el podcast radiofónico semanal “A través del Universo” patrocinado por el IAA. Un encuentro muy agradable y halagüeño para mí, pues me dijo que estaba al corriente de mis quehaceres astronómicos.


A mi derecha -según se mira- mi paisano el astrofísico Pablo Santos Sanz.

Después tuvo lugar la clausura. Entre las cosas a destacar se acordó realizar un listado de instrumental e instalaciones de la comunidad amateur española. De esta manera, el sector profesional podrá tener un juicio de valor a la hora de proponer actividades conjuntas. Las vías de comunicación podrán tener dos formatos diferentes en una sección especial que se integrará en la Web de la SEA: algo así como dos formularios de oferta y demanda. También se apuntó la idea de realizar otro encuentro similar dentro de un tiempo para analizar los resultados de las colaboraciones Pro-Am que tengan lugar en el futuro. La organización comunicó que tiene en mente publicar un libro con todo el material del congreso y que será remitido a cada uno de los congresistas. Además se nos expidió un certificado personal de participación.



El presidente de la SEA moderando la mesa redonda de conclusiones.

Al término, ya en el exterior, llegó el momento de las despedidas, los abrazos y los buenos deseos. Cuesta decir hasta pronto a un buen montón de nuevos amigos. Seguro que cada uno de nosotros, camino de nuestros destinos, tuvimos a Córdoba en el pensamiento y un excelente sabor de boca por lo que acabábamos de compartir.
Por mi parte, aún tuve tiempo de comer con Rafa Benavides y Juan Luis González en un céntrica terraza cordobesa, y es que, hasta en eso tuvimos suerte: últimos de noviembre y una temperatura excelente. Fue una despedida emotiva: ahora sé que sois de verdad. Gracias amigos. Hasta aquí.


ACTUALIZACIÓN: Por fin he conseguido una fotografía de todos los congresistas. Sin duda una imagen para la posteridad.
Encontraréis otras dos excelentes crónicas del Congreso en los respectivos blogs de mis compañeros Rafael Benavides (Cuaderno de Observación) y Juan Luis González (La Décima Esfera).


La gran familia. [Crédito imagen: (c) Joanma Bullón].

jueves, 12 de noviembre de 2009

COSAS MÍAS, ...COSAS VUESTRAS

Acabo de comprobar que mi contador ha sobrepasado hoy el número mágico de las 1000 visitas. ¿Recordáis el título de la primera entrada? UN LIENZO EN BLANCO, se llamaba. En estos meses ese lienzo se ha ido llenado con historias. Quizá menos de las que hubiera querido, pues la falta de tiempo material no me ha permitido escribir más. Aún así, estoy satisfecho con lo hecho. Todas las notas que he ido añadiendo mes a mes han sido el fiel reflejo de mis actividades astronómicas, tanto observacionales como de divulgación. Este Año Internacional de la Astronomía, está siendo un año intenso pleno de satisfacciones. Estoy convencido de que será una etapa dificil de olvidar. Incluso Duae Stellae arrancó con el AIA. Después vino OED (El Observador de Estrellas Dobles), la revista que es la niña de mis ojos y la de mis colegas de aventura (Rafa y Juan Luis) y su repercusión en el panorama de la Astronomía de las Estrellas Dobles. Observaciones publicas, conferencias, en fin, ¿qué os voy a contar que no sepáis ya? Bueno, aún queda algo muy especial que acontecerá antes de acabar el año y ya daré cumplida cuenta en su momento.
Todos los escritos acumulados en Duae Stellae tienen un significado muy especial para mí. Es lo que tienen los diarios personales. Uno se siente muy a gusto cada vez que transmite una experiencia. La idea es que la euforia y la pasión que yo siento al escribir cada palabra trascienda de algún modo y no se quede en mi interior. La idea es compartir afinidades, inquietudes, ilusiones. Que otros se sientan identificados de algún modo con lo que intento reflejar. Y, al mismo tiempo, que vuelvan a mí, en forma de comentarios -los vuestros- las opiniones de las personas que me leen. Es una especie de intercambio enriquecedor.
No sé si habré acertado hoy en la exposición de mis ideas; la verdad es que todo ha sido escrito de corrido, tal cual afloraba. En cualquier caso, el objeto de esta entrada no es otro que el de dar las gracias a esas más de 1000 almas que durante este tiempo han pasado por este espacio, muchas de ellas con reincidencia. Es más de lo que podía esperar. Seguiremos encontrándonos si os place. Gracias. Hasta aquí.

miércoles, 28 de octubre de 2009

DIAVERSARIOS…

Se cumple en estos días el séptimo aniversario de la inauguración de mi observatorio, el Observatorio Astronómico Camino de Palomares (OACP). Y no es que el “siete” tenga para mí un significado especial (en realidad tampoco lo tiene ningún otro número ordinal). Los años han ido pasando y cada uno de ellos tiene su propia memoria, sus satisfacciones y su carácter irrepetible. Todos son distintos y todos son especiales e igual de relevantes. Cada observación realizada es única y en ese instante la más importante. Por eso pienso que no existen aniversarios más representativos que otros y que esta máxima es aplicable a cada una de las facetas de nuestra vida. Lo verdaderamente notable es acumular experiencias. Experiencias enriquecedoras que nos harán crecer de manera progresiva y constante. Lo demás son tópicos y convencionalismos arbitrarios. Si hay que celebrar, celebremos, pero prefiero hacerlo al término de cada jornada, cuando cierro el observatorio para irme a dormir. Así pues, si se me concede la licencia para acuñar un nuevo vocablo, queda claro que soy partidario de los “diaversarios”.

Al margen de estas notas de índole personal me gustaría dar algunos retazos retrospectivos sobre la construcción del OACP. Recuerdo que sentí una agradable sensación de euforia cuando se dio por concluido el proyecto de tener un sitio fijo de observación. Era un sueño largamente perseguido que al fin ocupaba un lugar en el espacio: era real. La construcción se alargó durante justo un año. Las obras de albañilería (cimentación y pared circular) comenzaron el 16 de septiembre de 2001. Progresivamente, a lo largo de ese invierno y la primavera siguiente quedó terminada la obra civil (como yo la llamaba): revocado de paredes, suelo interior, base de la columna, instalación eléctrica, puerta, etc. La cúpula tuvo que esperar hasta las vacaciones de agosto y parte de septiembre y se montó en el tiempo record de 20 días (mejor dicho, tardes), siempre contando con la ayuda de mi amigo Carlitos, uno de los principales culpables de que me embarcara en la aventura. La cúpula, de 2,70 metros de diámetro se construyó íntegramente en madera según los planos que amablemente me enviaron (en 1998) desde la Agrupación Astronómica Sexitana Perseo (Almuñecar, Granada). En realidad, la documentación era un artículo firmado por Justi Poch i Creixell y publicado en el nº 73 de ASTRUM, marzo de 1987. Se modificaron algunas partes del concepto original siempre en aras de mejorar la funcionalidad. El 15 de septiembre de 2002 se colocó finalmente sobre el muro circular con la ayuda de amigos y familiares. Recuerdo muy gratamente aquella mañana de domingo y en concreto el momento en el que la cúpula dio su primera vuelta completa sin incidencias. Todavía resuenan en mis oídos los aplausos espontáneos de los presentes. Fue algo muy especial. En primera instancia instalé mi entrañable 114 mm y las primeras observaciones se realizaron a mediados de octubre de 2002: el OACP ya era totalmente operativo. En junio de 2003 llegó el nuevo telescopio que sigue siendo mi equipo actual (el Newton 200) y que tantas satisfacciones me está aportando.

A partir de entonces dejé de ser un “astrónomo a cielo abierto”. Acostumbrado como estaba a tener todo el cielo al alcance de la vista, la estrecha franja observable desde el interior hemisférico me suponía una limitación. Recuerdo que al principio tuve una sensación rara, casi claustrofóbica. Sin embargo, en poco tiempo asumí la filosofía inherente a un observatorio: la ventana de observación muestra la zona de interés; el resto del cielo, esa noche, no importa. Cuando uno acepta esta conditio sine qua non las viejas costumbres dejan de tener peso y se abraza sin dilación la nueva forma –lógica- de trabajar. Tampoco hay que dejar de lado la comodidad. Cuando se saborea cuesta volver atrás. El equipo, salvo eventuales contratiempos, siempre está en guardia, siempre a punto. Bastan cinco o diez minutos para que la observación se ponga en marcha y se da un aprovechamiento óptimo del tiempo disponible. Eso sí, cuando doy por terminada una sesión, ya en el exterior, me deleito, por puro placer, contemplando a ojo desnudo cada palmo del firmamento, mientras se consume quedamente el tabaco de mi pipa.

El rendimiento de la cúpula en estos años ha sido excelente, si bien las dos compuertas (deslizante y abatible) de la ventana de observación se han deteriorado de manera considerable; tanto, que durante el pasado invierno resultaba toda una odisea abrir la corredera, siendo continuos los atasques por la deformación estructural. Durante la primavera de este año me hice el firme propósito de solucionar el problema y construir dos nuevas puertas mejorando el diseño en lo posible. Aprovechando pues que se avecinaban reformas en el observatorio, decidí acondicionar también el interior y en el mes de julio le di una mano de pintura, tanto a las paredes interiores y el suelo, como a la propia superficie interna de la cúpula. Había que sanear. En agosto, siempre con mi incondicional Carlos, me embarqué en la construcción de las puertas. La estructura se hizo de madera contrachapada de 19 mm de espesor con una imprimación especial antihumedad. El contrachapado tiene la ventaja de que prácticamente no se deforma. Para las cubiertas –y esta es la principal innovación y mejora- utilicé dos planchas de PVC de color blanco de 5 mm de espesor que asegurarán una larga durabilidad. Es sabido que este material soporta de manera eficaz los cambios bruscos de temperatura y es inalterable ante la humedad. Además, se añade la ventaja de no tener que pintar nunca más. La puerta antigua se deslizaba por sus carriles de desplazamiento por fricción mediante unos simples tacos de teflón. En esta ocasión he montado cuatro ruedas pequeñas para que el movimiento sea más suave. El aspecto es flamante y el funcionamiento perfecto. Algunas zonas de los arcos principales que mostraban evidentes trazas de ser haber sido atacadas por la humedad se retocaron con fibra de vidrio y poliéster. Finalmente, las labores terminaron con dos generosas manos de pintura a todo el exterior de la cúpula. Os muestro unas imágenes de todo el proceso.


Estructura de contrachapado compuerta corredera.



Montaje de las nuevas cubiertas de PVC.



Últimos remates: junta vierteaguas.



Mi amigo Carlos en primer plano. Gracias chavalín.



Pruebas de apertura y cierre.



Pintura exterior.



El resultado de un trabajo bien hecho.

Y bien, sinceramente, mi intención era hacer una entrada corta pero me he liado la manta a la cabeza y… En cualquier caso, si pasáis por aquí, sed benevolentes y entended que en este diaversario os conté la historia de mi observatorio y algunas de mis sensaciones. Hasta aquí.

domingo, 25 de octubre de 2009

ASÓMATE AL UNIVERSO... DESDE VALLADOLID

Esta tarde he recorrido algunas de las paradas de autobús de la zona donde vivo. La razón: ir a la caza de algunas instantáneas de excelentes fotografías astronómicas de la NASA y la ESA. Me explico.
Desde hace unos días los vallisoletanos podemos admirar hermosas (y grandes) estampas del Universo repartidas por toda la ciudad, las cuales han sido colocadas en los expositores de 170 marquesinas de las paradas de autobús. Esta innovadora iniciativa, como una más de las actividades del AIA2009, parte del Museo de la Ciencia de Valladolid en colaboración con la Obra Social de Caja España y Cemusa una empresa líder en el sector de publicidad exterior. La exposición lleva el nombre de "Asómate al Universo desde Valladolid" y como complemento, cada fotografía va acompañada de una breve explicación y una cita poética alusiva. Tengo que decir, que en el pie de cada póster también figura impreso el link de la Web mi asociación, como entidad divulgadora de la Astronomía en la ciudad.
Mi impresión personal es que es una idea redonda que a buen seguro está haciendo las delicias de todos mis paisanos. Y es que el estrés de la vida diaria se verá reducido en estos días, cuando la gente, imbuida en la vorágine del día a día, pueda mirar (y más importante, admirar) el Cosmos mientras llega el autobús que da continuidad a sus actividades. Enhorabuena a los promotores. Os muestro unas imágenes. Hasta aquí.




        


Fachada de Caja España en la Plaza de Fuente Dorada de Valladolid.
Crédito imagen: Museo de la Ciencia.

sábado, 3 de octubre de 2009

ALGO SE MUEVE ...

Esta tarde, como cada principio de mes desde el año 1991, he visitado a Mariano, mi kiosquero de toda la vida, para comprar la revista AstronomíA. Mi acercamiento al kiosco ya se ha convertido en algo ritual en estos años. Es una cita ineludible por mi adicción a las páginas de la revista, y deseada por los jugosos intercambios de impresiones con Mariano, el cual, siempre me sorprende con preguntas e inquietudes sobre temas astronómicos. Él, me plantea las cuestiones a su manera, a veces un tanto peculiar, pero siempre cargadas de contundencia y fundamento. Una delicia. Y, es que, Mariano y yo estamos envejeciendo juntos. Una gran persona, sin duda y un gran amigo. Por cierto, ya le he encargado que me reserve la revista para los próximos 100 años. Luego ya veremos.


Bien, pues camino de mi casa, como hago siempre, he ido hojeando el ejemplar de este mes (nº 124), y me he llevado una muy agradable sorpresa. “Algo se mueve en las estrellas dobles”. Con estas palabras comienza un artículo redactado por mi amigo y compañero Juan Luis González Carballo. El escrito aparece en la sección fija sobre estrellas dobles que tan bien dirige Rafael Benavides desde hace varios años. “Algo se mueve en las estrellas dobles” es un verdadero deleite en estilo y contenido. Los que ya somos incondicionales a las dobles encontraremos en sus palabras el fiel reflejo de nuestra situación. Los simpatizantes y futuros bautizados en esta disciplina hallareis el empujón final. Por supuesto, no voy a desvelar nada más. Os aliento a su lectura pausada y tremendamente enriquecedora: en mil palabras, mil razones, para observar estrellas dobles.

Juan Luis, enhorabuena por tan excelente colaboración en AstronomíA. Ha sido un placer leerte. Hasta aquí.

martes, 22 de septiembre de 2009

PRIMER ENCUENTRO ENTRE ASTRÓNOMOS PROFESIONALES Y AFICIONADOS EN ARGENTINA


El pasado fin de semana (días 19 y 20) se celebró –en la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas de la Universidad Nacional de La Plata- el 1º Encuentro entre Astrónomos Profesionales y Aficionados. Esta reunión, organizada por la Secretaría de Extensión Universitaria de la Facultad y enmarcada dentro de las actividades del Año Internacional de la Astronomía 2009, tiene como objetivo generar un ámbito que propicie el acercamiento entre la comunidad de astrónomos aficionados y la profesional en Argentina.


De entre el variado programa de conferencias me gustaría destacar la impartida por mi colega y amigo Carlos A. Krawczenko, con el que junto a Rafael Benavides, comparto el cargo de Coordinador Adjunto de la Sección de Estrellas Dobles de la Liga Iberoamericana de Astronomía (LIADA) con sede en Argentina. Krawczenko representó a nuestro grupo impartiendo una conferencia titulada “Qué es y cómo trabaja la Sección de Estrellas Dobles de la LIADA”. Carlos es un excelente divulgador y el principal impulsor de las estrellas dobles en Argentina dentro del ámbito amateur. Conociéndole, estoy seguro de que hizo una exposición impecable y que los oyentes profesionales tomaron buena nota de su disertación. Quizá en un futuro no muy lejano lleguen los frutos de su esfuerzo en forma de algún tipo de colaboración Pro-Am. Aquí podéis ver a Carlos en plena faena:

Además, en el evento, también se organizó una exposición de posters científicos y Carlos defendió el poster que Francisco Rica, Rafael Benavides y el que suscribe presentamos en el Simposium profesional de Praga en agosto de 2006 (Simposium No. 240 de la IAU "Binary Stars as Critical Tools and Tests in Contemporary Astrophysics"), dando a conocer los trabajos de la Sección de Dobles LIADA.


Otra interesante actividad fue la visita al emblemático Observatorio Astronómico de la Plata, ubicado en el mismo recinto de la Universidad. Aquí os muestro el gran refractor del observatorio y la tradicional foto de familia que reunía a más de 150 participantes.







En fin, seguro que habrán sido un par de días inolvidables y desde aquí quiero felicitar efusivamente –en mi nombre y en el de todos los compañeros del Grupo- a Carlos A. Krawczenko por su éxito y por permitirme compartir las imágenes mostradas.


Feliz equinoccio y verano, Carlos.

martes, 1 de septiembre de 2009

DÍAS DE PAJA, NOCHES DE ESTRELLAS

Han pasado casi dos meses desde la última entrada. Precisamente esos meses del estío que parecían tan largos y lejanos. Y el caso es que han pasado en un tris, casi sin darse uno cuenta. Ha sido un verano caluroso, casi tanto como aquellos que ahora rescato de los recuerdos de mi infancia. Días secos, como hechos de polvo y rastrojos, los mismos rastrojos y el mismo polvo que colorean de ocre las desoladas llanuras de la Tierra de Campos. Tan solo el quejido de la cigarra rompe la monotonía de las horas dilatadas, de la galbana del tiempo en los instantes sagrados de la siesta castellana. Siesta reparadora, sin duda, que parafraseando a Cela “ha de hacerse como Dios manda, a saber, con pijama padrenuestro y orinal”. Como reza el dicho popular, hay días estivales en los que los árboles corren detrás de los perros implorando un poco de humedad.
Cuando el día agoniza y el Sol pasa de ser implacable a benévolo y clemente, la gente de piel curtida sale de su letargo y siempre repiquetea en los oídos la misma frase: “ahora se vive”. Cuando las primeras estrellas asoman, medrosas y tímidas, es el momento mágico y ritual de regar con la fuerza vívida de la manguera la pared circular del observatorio, de abrir la cúpula y dejar que, lentamente, el ardor del día se escape a soplos desde su interior. Después, tras la cena, con la noche ya asentada, llega la hora de robarle al cielo sus secretos. Dentro del recinto, reina el silencio, un silencio solo contaminado por el leve zumbido del ventilador de la CCD y el carraspeo del disco duro al codificar fotones en forma de imágenes. Aunque siendo sincero, a veces me sorprendo hablando solo cuando logro encontrar alguna estrella doble difícil y rebelde. Esas horas pasan rápido, tanto, que si las condiciones lo permiten uno resiste hasta casi acariciar el alba.
En próximas entradas os haré partícipes de mis actividades veraniegas.
Me gustaría ahora, antes de cerrar, comunicar que desde hoy está disponible el número 3 de El Observador de Estrellas Dobles. Como coeditor puedo decir que ha salido una entrega repleta de excelentes artículos, listas de medidas y descubrimientos de nuevos pares. Enhorabuena a mi colega Juan Luis González por su primer descubrimiento que, de esta forma, se hace oficial en nuestras páginas. Mi agradecimiento a todos los que han hecho posible este nuevo número con sus aportaciones. Yo he colaborado con un artículo de investigación sobre el Micrómetro de Lámparas de William Herschel. Ha sido un mes de duro trabajo pero hemos conseguido ser puntuales. Que disfrutéis de la lectura. Vale.

viernes, 10 de julio de 2009

¿QUIÉN QUIERE IR A MARTE?

Pues sí, ahora es posible viajar a Marte, aunque solo sea con nuestro nombre. Me explico. Resulta que la NASA, como ya hizo en misiones precedentes (tal es el caso el caso del Spirit y el Opportunity) enviará a Marte los nombres de todos los interesados, e iran grabados en un microchip a bordo de la próxima misión Mars Science Laboratory rover, prevista para el 2011. Basta con entrar aquí y rellenar los datos para que nuestro nombre se registre de manera oficial. Además, tras este paso, se expide un certificado de participación acreditativo. No deja de ser una cosa curiosa, que puede ser otra actividad más en este Año Internacional de la Astronomía. En especial, puede ser muy atrayente para los más pequeños, aunque también para los mayores: ¡yo ya tengo mi certificado!

domingo, 5 de julio de 2009

LA SAY EN LA REVISTA ASTRONOMÍA

Acaba de salir un nuevo número de AstronomíA. En la sección Asociaciones de esta revista, Alberto Romero y Lydia García, miembros de la Agrupación Astronómica de Cádiz (Hércules), dan cuenta mes a mes de las asociaciones astrónomicas amateurs repartidas por la geografía española. Una excelente iniciativa que sirve para darnos a conocer esos grupos de astrónomos entusiastas que se esfuerzan por divulgar la ciencia astronómica. Pues bien, este mes le ha tocado el turno a la asociación a la que pertenezco: la Sociedad Astronómica Syrma y el Grupo Universitario de Astronomía (GUA) de Valladolid.
En un excelente artículo, los autores hacen un repaso histórico y actual por mi asociación: dando datos sobre su fundación y documentando todos sus estados evolutivos, los cuales han permitido que la SAY sea en la actualidad un grupo moderno y con empuje. Y que conste que no es pasión de "hijo"; en verdad, son muchas las actividades divulgativas que en el seno de la asociación de desarrollan, siempre impulsadas por un grupo de entusiastas altruistas que ofrecen su tiempo y sus conocimientos para intentar acerca el cielo a los demás. No os desvelo más detalles sobre la estructura de Syrma y el GUA. Os emplazo a que leáis el artículo de AstronomíA.
Me gustaría, sin embargo, rendir homenaje a mis compañeros. Sin duda es muy importante el factor técnico y los medios, pero mucho más lo es el factor humano. El verdadero motor de una asociación son las personas y su entusiasmo a la hora de acometer una empresa de este tipo. Gracias a todos por construir un grupo como el nuestro donde prima la calidad humana.
En lo que a mi respecta, debeo decir que me ha hecho mucha ilusión leer los párrafos referentes al grupo de estrellas dobles que fundé hace unos años y que coordino desde entonces: Syrma-MED. También aparece publicada una imagen de la primera binaria que descubrí, MRI 1, y he sentido algo muy especial.
Aprovecho, antes de cerrar esta entrada, para desearos un buen eclipse a todos lo que vais a China dentro de unos días. Disfrutadlo, os lo habéis ganado.

sábado, 4 de julio de 2009

NÚMERO DE VERANO DE JDSO

Hace un par de días se publicó el número de verano de Journal of Double Star Observations (JDSO).
Como viene siendo habitual, muchas de las páginas de esta publicación están firmadas por doblistas hispanohablantes que,  en un goteo constante, aportan trabajos de una gran calidad. En este número 3 del Volumen 5 vuelve a repetirse la situación: de los 7 artículos publicados, 2 pertenecen a dos duplicistas bien conocidos por todos nosotros, habituales colaboradores de la Sección de Estrellas Dobles de la LIADA.
Me estoy refiriendo a Ángel Manuel López Borrega y Rafael Caballero Roldán.
Ángel Manuel, con quien vengo manteniendo correspondencia desde hace quizá un par de años, es actualmente Coordinador del Grupo de Estrellas Dobles de la Agrupación Astronómica de Madrid. Creo que esta es su primera publicación en inglés, e imagino que estará muy satisfecho con su trabajo: Results of Measurements for Struve and Baillaud Stars, aportando medidas para estrellas dobles olvidadas. Las mediciones las ha realizado sobre placas digitalizadas profesionales procedentes de varios surveys disponibles en Internet. Este trabajo viene a demostrar, una vez más, que no es necesario disponer de un equipo óptico "material" para realizar trabajos serios: hoy en día gracias a Internet, el Observatorio Virtual permite investigar sin tener ¡telescopio ni CCD!
Rafael Caballero es miembro de la Agrupación Astronómica Complutense y de la Asociación Astronómica Hubble, y nos ha sorprendido con un excelente articulo titulado Finding New Common Proper-Motion Binaries by Data Mining, en el que da a conocer nada menos que 110 nuevos pares de movimiento propio común utilizando, al igual que Ángel, técnicas de Minería de Datos (Data Mining) sobre bastantes catálogos astrométricos disponibles on-line.
Desde este rincón quiero rendir homenje a mis dos colegas y felicitarles por estos logros que,  sin duda, no son más que el preámbulo de una prolífica y fructífera actividad astronómica de la que seremos testigos.
¡Enhorabuena compañeros! 

miércoles, 20 de mayo de 2009

Entrevista en Desde el Sur: explorando el Cosmos

Hoy han emitido una entrevista que me hicieron para Desde el Sur: explorando el Cosmos, un programa radial en formato podcast que trata sobre temas de Ciencia y Tecnología centrados en la Astronomía y Ciencias del Espacio. En este espacio, que se emite desde Argentina, hablé durante unos 15 minutos sobre el contenido que hemos publicado en el número 2 de OED.

Hay que decir, que dado el carácter tan internacional de este programa, esta entrevista supondrá una tremenda difusión para OED, principalmente en todos los países hispanohablantes. En mi nombre y en el de los otros dos editores (Juan Luis González y Rafael Benavides) nuestro agradecimiento nuevamente a Ricardo Sánchez, presentador y coordinador de la emisión, quien desde un principio brindó todo su apoyo a nuestra revista.

El podcast (Programa nº 133) puede oírse o descargarse en MP3 en el blog del programa.

domingo, 17 de mayo de 2009

ALGUNAS DOBLES STEIN

Viene siendo habitual que mis programas de observación de series más o menos largas de estrellas dobles sean realizados durante los meses estivales. Así aseguro cierta continuidad en el desarrollo de las observaciones, pues la climatología agradable y el periodo vacacional me permiten observar casi todas las noches, claro está, con el permiso de las nubes. De esta manera acumulo trabajo para todo el invierno, durante el cual, me dedico a la reducción de las imágenes CCD y a las mediciones en sí. Por otro lado, en los cielos invernales de Valladolid abundan, por lo general, las noches nubladas y húmedas, las fuertes heladas y frecuentemente densas y persistentes nieblas que reducen drásticamente las noches aprovechables.
Es curioso que las tareas relativas a la reducción de las imágenes consuman muchísimo más tiempo que las propias observaciones. Son muchas las horas que hay que pasar ante el ordenador para obtener una lista de medidas publicable. Normalmente, trabajo sobre pares olvidados o relativamente abandonados para actualizar sus parámetros. Estos tipos de dobles llevan, pues, bastantes años sin ser observadas –a veces solo fueron medidas en su descubrimiento- y es necesario actualizar sus posiciones relativas. Por sistema, para cada doble que mido solicito al USNO el archivo de observaciones históricas. Esta sana costumbre me sirve para comprobar si la nueva medida que he realizado cumple el patrón de comportamiento que ha tenido el par a lo largo del tiempo. A veces, debido a altos movimientos propios, las componentes no se hallan en el lugar esperado, incluso ciertos pares se han perdido y es imposible encontrarlos. Es este sentido, realizo siempre una inspección del campo con la herramienta Aladin, de donde extraigo información de un buen montón de catálogos de todo tipo y puedo ver visualmente los vectores de movimiento propio de las componentes. Puede apreciarse que hay una gran dosis de Observatorio Virtual en este tipo de trabajos y es una inestimable ayuda poder disponer de estas herramientas gracias al poder de Internet.
En ocasiones, durante la inspección visual de mis imágenes CCD aparecen dobles no catalogadas. En estos casos realizo un estudio completo para dilucidar si el nuevo par tiene posibilidades de ser un sistema físico, en cuyo caso la pareja será propuesta para su inclusión en el WDS como nuevo descubrimiento. También suelo buscar de manera expresa, en las cercanías de cada doble, si existe alguna estrella que comparta movimiento propio con el par principal; es frecuente poder añadir una nueva componente al sistema ya catalogado. Todas estas labores, exigen una gran cantidad de concentración y tener la mente despierta para no dejar ningún cabo suelto. Es una labor metódica en la que no caben las prisas y la paciencia es su principal característica; la minuciosidad se ve recompensada con la adictiva ocupación detectivesca que conlleva.
Una vez terminado todo el proceso viene la parte de la redacción de un artículo que dé cuenta de todos los pormenores, conclusiones, las tablas con las nuevas medidas y la más completa documentación con notas referentes a cada pareja. Hago especial hincapié en este último apartado: si una pareja es claramente óptica de acuerdo a los criterios de caracterización empleados, es importante dejar claro que no habrá ninguna razón para volver a medirla; sencillamente, no tiene ningún interés astrofísico. La publicación de un artículo con todos los datos permitirá que no se pierda el trabajo realizado y las medidas puedan ser incorporadas al WDS.
Ahora estoy haciendo las reducciones de las imágenes que obtuve en el verano de 2008. Ando aproximadamente a la mitad, por lo que todavía tengo trabajo por delante. El resultado final será la segunda serie de medidas realizadas en mi observatorio (OACP) trabajando con la cámara Meade DSI Pro. Tanto mis ocupaciones divulgativas (AIA 2009) como editoriales (trabajar en la publicación de los dos números de OED) me han tenido apartado de las mediciones más de lo esperado. Ahora, con algo más de tiempo disponible, he retomado el trabajo. En esta segunda serie abundan los pares débiles abandonados con los códigos J (Jonckheere) y STI (Stein). Es muy interesante (y enriquecedor) conocer quiénes eran los duplicistas que descubrieron y catalogaron las dobles que midamos y también, en qué condiciones lo hicieron, con qué instrumentos y dónde se realizaron las observaciones. Estos detalles siempre ayudarán a comprender sus hábitos y a entender sus resultados; es decir, tendremos una visión del porqué de ciertas tendencias en las mediciones, por ejemplo. En esta ocasión hablaré de las dobles Stein o STI. Veamos.
Johannes Wilhelmus Jacobus Antonius Stein (1871-1951).
Crédito imagen: Instituut voor Nederlandse Geschiedenis

Las dobles catalogadas con el código STI fueron descubiertas por el padre jesuita Johan W. J. A. Stein (1871-1951) de origen holandés. Tras estudiar matemáticas y física en la Universidad de Leiden y doctorarse, trabajó como asistente en el Observatorio Vaticano (desde 1906 hasta 1910), siendo director del mismo Johann Georg Hagen (1847-1930), jesuita también. Stein y Hagen mantuvieron una fructífera colaboración científica más allá de la inicial etapa en la que coincidieron en el observatorio. El Observatorio Vaticano participaba en el gran proyecto del Catálogo Astrográfico (AC) puesto en funcionamiento por el Observatorio de Paris y que consistía en cartografiar fotográficamente todo el cielo registrando estrellas hasta la magnitud 11. Los observatorios participantes en el proyecto -unos 20 repartidos por todo el mundo- se repartieron el cielo en determinadas zonas de declinación y todos ellos utilizaron astrógrafos idénticos para que los resultados fueran comparables. Stein, volvió en 1930 como sucesor de Hagen aceptando el cargo de director del Observatorio Vaticano. Durante su mandato, que duró hasta 1951, transformó el observatorio en una institución más moderna y acorde con los nuevos tiempos, aumentó la plantilla y lo equipó de toda la instrumentación necesaria para hacer, estudiar y medir fotografías celestes. En 1932 fundó un laboratorio de astrofísica para análisis espectroquímicos que trabajó en conexión con el observatorio y en 1933 estrenó unas nuevas instalaciones trasladando el observatorio a Castelgandolfo, a unos 35 km al sur de Roma, para alejarse de la incipiente contaminación lumínica que ya por entonces empezaba a borrar las estrellas del cielo romano. Stein fue también un experto en estrellas variables y completó el Atlas stellarum variabilium de Hagen.
Las estrellas dobles de Stein fueron todas descubiertas y medidas sobre las placas fotográficas realizadas en la Zona Vaticana del Catálogo Astrográfico. Su listado final de descubrimientos se publicó en Roma (1930) con el título de Stelle doppie nel catalogo... Vaticano. Es por esta razón que los pares STI son por lo general débiles y poco vistosos para el observador visual (las magnitudes oscilan entre 9 y 14). La profundidad fotométrica de las fotografías permitió que Stein se especializara en los pares débiles. Asimismo, ésta es la causa de que muchas de sus dobles hayan sido muy poco -o nada- observadas con posteridad y haya un buen paquete de STIs etiquetadas como olvidadas (alrededor de un 18% de ellas). De los 2149 pares STI listados en WDS muy poquitos sobrepasan las 8 observaciones, habiendo una gran cantidad de ellos con solo 2, 3 y 4 medidas oficiales. A la vista de estas cifras, el estudio sistemático de estas dobles es sin duda una labor muy interesante y provechosa, pues se estima que al menos la tercera parte de las dobles STI son físicas. Además, la debilidad fotométrica de las componentes deja de ser un problema usando cámaras CCD en las observaciones y el rango de separaciones (variando entre los 3” y 15”) es asequible a equipos relativamente modestos.
Os presento a continuación una pequeña muestra de los STI que estoy estudiando ahora. Todos los pares se localizan en Casiopeia y han sido medidos con Reduc.
STI 210. Dos estrellas de magnitudes 11,85 y 13,50. Cuenta con solo tres medidas oficiales y he medido Theta = 79,93º y Rho = 15,15". El ángulo y la distancia están aumentando desde 1901.

STI 219. Las magnitudes son 10,88 y 12,50. Solo observada en tres ocasiones. Hay discrepancia en el ángulo de posición según las medidas históricas y parece que la separación aumenta lentamente. Mis medidas son Theta = 37,29º y Rho = 6,569".


STI 221. Solo observada en tres ocasiones desde 1901. Sus movimientos propios son incompatibles por lo que estamos ante un claro par óptico. Mis medidas han sido Theta = 183,00º y Rho 15,014" en perfecto acuerdo con las medidas de 2MASS de 1999. La débil estrella situada a la derecha de la principal tiene un movimiento propio no idéntico pero similar al de A, por lo que podría estar asociada. Es algo que tengo que determinar aún, pero podría ser un nueva componente C.

STI1398. El par está compuesto por dos estrellas de magnitudes 11,10 y 12,00 y solo ha sido media en tres ocasiones. El ángulo se mantine estable desde 1911 y la separación parece incrementarse lentamente. Mis medidas Theta = 90,21º y Rho = 14,225".

STI1400. Una sugestiva imagen donde la pareja es uno de los vértices de un triángulo equilátero casi perfecto. Tan solo cuenta con tres medidas oficiales y las magnitudes de las componentes son 11,10 y 12,60. Theta aumenta y Rho disminuye. Mis parámetros son Theta = 143,47º y Rho = 7,897".



Seguiré mostrando más de estos pares en próximas entradas.
Mientras tanto, cielos limpios para todos.